Ser presidente de un club de fútbol no es nada fácil. Mucho menos para Paola Salazar, presidenta del Rionegro Águilas Doradas de Colombia, uno de los 44 integrantes de la CONMEBOL Sudamericana, en un ambiente tan machista como el del fútbol.

Sin embargo, a ocho años de la fundación del club, Salazar combina pasión con trabajo y esfuerzo y convirtió a su institución en un referente emergente del fútbol colombiano. Todo esto, junto a su familia, quienes también trabajan en distintas áreas del club.

“Cuando me hermano me invitó a ser parte de este proyecto, yo misma no lo había dimensionado. Todos creen que es algo simple, jugar un partido y ya, pero hay aspectos impresionantes en los que trabajar. Empezamos con la construcción de la estructura administrativa y financiera en el año 2008 y hoy ya tenemos una institución completamente constituida”, contó la primera y única presidenta de un club de Primera División en el continente a Marketing Registrado.

“Creo que el resto de los dirigentes pensaban al principio que yo estaba ahí de adorno. Se fueron dando cuenta que se del tema, que conozco y me siento súper bien con los colegas en Colombia y con el presidente de la Dimayor”, comentó, además, respecto a sus inicios en la dirigencia.

Sin muchos ánimos de trascender en los medios, y muy apegada a su familia, Salazar demuestra de todas formas un importante compromiso con el futuro de la institución que dirige. “En lo deportivo, mi hermano Fernando Salazar es el jefe de la comisión técnica. En lo institucional tengo un equipo de colaboradores pero estoy pendiente de todos los detalles para no dejar nada al azar”, comentó.

Rionegro Águilas fue fundado en 2008 y disputará con esta edición 2017 su cuarta CONMEBOL Sudamericana. Tras algunos cambios de nombre y de sedes, por un destierro por parte de la alcaldía de Itagüí y un paso por Pereira, el club se estableció en Rionegro y desde allí busca hacer crecer su modelo de trabajo, con gran apoyo en las divisiones inferiores y la integración familiar.

“Este presente es el resultado de un trabajo de total responsabilidad. Tenemos un plantel totalmente comprometido y nos estamos jugando algo muy importante para nuestra historia”, añadió Salazar.

Además de dirigir a un club de Primera División y de llevar adelante su familia – tiene un hijo de 3 años – Paola Salazar encabeza la Comisión de la Liga Profesional de Fútbol Femenino en Colombia.

“Yo personalmente quisiera un poco más de participación de mujeres en el fútbol. No sólo porque somos más organizadas y metódicas, sino porque creo que también haría creer al fútbol en su estructura”, contó en base a esto.

“La FIFA apoya mucho al fútbol femenino y están muy contentos por el trabajo que hicimos en Colombia, con la Liga femenina que ya es una realidad. Los equipos lo tomaron con mucha responsabilidad. Se inscribieron 18 de los 36 equipos, que es algo importante teniendo en cuenta los requisitos que había que cumplir. Armaron sus nóminas con jerarquía, contrataron extranjeras y trabajaron fuertemente en lo físico para llegar de la mejor manera al debut”, agregó.

Por último, dejó su deseo para Rionegro Águilas Doradas: “Como club queremos ser campeones de Colombia. Esta Copa Sudamericana es un sueño y queremos avanzar no solamente porque representa un logro deportivo sino también por lo económico, ahí combinamos los dos aspectos”.