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Volvemos a la moto, volvemos a soñar

Volvemos a la moto, volvemos a soñar
Jueves 18 de Febrero de 2016

Ha pasado poco más de un mes desde que terminó el Dakar 2016. Y aunque todavía están frescas y vívidas los recuerdos de aquella odisea, es momento de mirar al frente. Momento de subir nuevamente a la moto, de acelerar y correr con miras al Dakar 2017.

En un deporte tan dinámico como el motociclismo, uno no puede dormirse, no puede parar. Es por eso, que desde esta semana comenzamos nuevamente a trabajar. En los próximos 11 meses, mi vida transcurrirá entre el gimnasio, la piscina, los circuitos de bicimontaña, las sesiones con el sicólogo, con el fisioterapeuta, el nutricionista y, por último, las horas a bordo de la moto.

Puede parecer mucho, pero si uno quiere destacar a nivel internacional, es necesario realizar todos los esfuerzos posibles para llegar a lo más alto. Y el Dakar siempre exige al máximo a cada uno de sus competidores. Y cuando digo al máximo, me refiero en todos los ámbitos. En lo psicológico y en lo físico.

Es por eso, que si bien las imágenes del Dakar 2016 todavía están frescas en mi memoria, al frente ya visualizo lo que quiero hacer y lo que quiero lograr para el 2017. ¿Y ustedes? ¿Se animan a acompañarme en este viaje?