UEFA Champions League

La explicación de la Unión Europea de Judo sobre la lesión de Salah en la final de la Champions

El organismo rector del deporte japonés bromeó con la jugada en donde Mohamed Salah se lesionó el hombro izquierdo y tuvo que ser reemplazado en la final de la Champions.
La explicación de la Unión Europea de Judo sobre la lesión de Salah en la final de la Champions
Domingo 27 de Mayo de 2018

Un par de días después de que el Real Madrid superara al Liverpool en la final de la UEFA Champions League y se alzara así con su decimotercera Liga de Campeones en su historia, la Unión Europea de Judo empleó su cuenta oficial de Twitter para bromear acerca de los riesgos que se corre al realizar una maniobra como la que sufrió Salah en el momento de su lesión durante el primer tiempo.

El partido se encontraba aún igualado a cero cuando una desafortunada jugada entre el defensor del Real Madrid, Sergio Ramos y el delantero del Liverpool, Mohamed Salah forcejearon por la pelota y el resultado fue la mala caída del egipcio sobre su hombro izquierdo y consecuente reemplazo por lesión en desarrollo del encuentro.

Bromeando con relación a la jugada y a las innumerables repercusiones generadas al respecto, fue el ente regulador del arte marcial japonés en Europa el que publicó una imagen a modo de meme con la siguiente leyenda: “Waki-gatame es una peligrosa técnica. Es por eso que no está permitido en el judo usarlo para la transición al ne-waza”.

A lo que enseguida añadió: “Mientras que este movimiento está permitido en competición, dejarse caer sobre el piso en el intento de realizarla es considerada hansoku-make o infracción grave, debido al riesgo potencial de lesiona el brazo del oponente”.

Resulta que la maniobra, de la que se habla, forma parte de una de las 29 técnicas de agarre de judo desarrolladas por Jigoro Kano, y pertenece a las nueve llaves de la lista kansetsu-waza, clasificada como armlock.

Se entiende que al exponer la salud del rival, el judo pena su utilización gravemente, situación que en esta ocasión trasladada al fútbol no terminó ni siquiera con la amonestación del defensor andaluz, acusado fuertemente de intencionalidad en su accionar en redes sociales.