Con la idea de hacer crecer el fútbol femenino en la región, la CONMEBOL tomó una decisión muy importante en lo que tiene que ver con las copas internacionales. La idea principal es beneficiar al fútbol femenino que corre en desventaja en esta parte del mundo.

La entidad que regula el fútbol en Sudamérica tomó la determinación que los equipos que participen de las Copas Libertadores y Sudamericana, a partir del 2019, deberán tener un plantel femenino en sus clubes para que puedan participar de estos torneos.

Según el reglamento, además de tener un primer equipo femenino, los clubes deberán tener por lo menos una categoría juvenil y ambos equipos deberán participar de un torneo de la Asociación local. Por último, pero no por eso menos importante, cada institución tendrá que tener instalaciones preparadas adecuadamente para que el equipo femenino pueda entrenarse y disputar los partidos oficiales.

Esta nueva regla, que comenzará a funcionar desde 2019, tomó de sorpresa a muchos, pero no a los equipos que ya están clasificados para la próxima Copa CONMEBOL Libertadores. Boca Juniors, Godoy Cruz, San Lorenzo, Huracán y Talleres, este último clasificado a la Fase previa, más el campeón de la próxima Copa Argentina serán los primeros equipos que pongan en práctica esto. Todos estos clubes poseen un plantel de fútbol femenino y por eso los planteles masculinos no corren riesgo de no poder participar de la Copa.

En cuanto a la Copa Sudamericana sucede lo mismo. Independiente, Racing, River, Defensa y Justicia, Unión y Cólon tampoco tendrán problema porque cuentan con planteles femeninos que participan de los torneos de la AFA.

Excepto Tigre y Patronato, todos los demás equipos de la Superliga Argentina tienen equipos femeninos. De los países sudamericanos, el más avanzado en este tema es Colombia, que incluso posee una liga profesional. Brasil también la tiene pero la infraestructura es un punto flojo en ese país. Bolivia, Paraguay, Perú, Venezuela, Chile, Ecuador y Uruguay son los países que tienen el fútbol femenino menos desarrollado.

“La idea es que los clubes inviertan en fútbol femenino. En caso de no poder formar equipo propio se pueden realizar convenios con otros clubes, lo que no hay que perder de vista es que el club con posibilidades de competir en una Copa deberá proveerle infraestructura para entrenamientos, soporte técnico y posibilidades de competencia, a ese equipo de mujeres: deben invertir no sólo en fútbol masculino, porque el femenino viene creciendo en todo el mundo y CONMEBOL no quiso quedarse fuera de este proceso", comentó Mariano Zavala, abogado de la CONMEBOL que se encarga de las licencias.

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