Mientras se define la Copa Mundial de la FIFA en Rusia 2018, varios de los países no clasificados o eliminados del certamen posan sus ojos en lo que será la próxima cita mundialista a desarrollarse en Qatar cuatro años más adelante.
Con una base de infraestructura y logística casi nula para albergar una Copa del Mundo, Qatar ha puesto en marcha entre otros, una ciudad destinada pura y exclusivamente para el certamen y en donde se planea jugar el partido inaugural y la final.
En un proyecto que inició casi en el medio del desierto y lamentablemente ya ha cobrado miles de vidas humanas por lo despiadado de su realización, Qatar multiplica esfuerzos por cumplir con las fechas y tener a la nueva ciudad de Lusail para fines del 2019.
Allí funcionarán dos puertos deportivos, un shopping y hasta un zoológico, además de un aproximado de 450 mil casas para quien quiera y pueda mudarse antes, durante y después de la Copa del Mundo.
Según revelan medios locales, el costo de crear una “ciudad nueva” para el Mundial será de aproximadamente 45000 millones de dólares, garantizando todos los requisitos necesarios para recibir a los protagonistas, aficionados y medios de prensa al contar con la ventaja de que todo está siendo diseñado desde cero y enfocado a la cita mundialista.
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