En estos últimos días se habló mucho acerca del poderío del fútbol brasilero a partir de la supremacía de sus equipos en las fases finales de la Copa Libertadores.
Más allá de haber ganado la Copa América 2021 en el mismísimo Maracaná, contra Brasil, tras 28 años de sequía, el fútbol argentino no atraviesa su mejor momento. Si bien apenas 3 jugadores de Argentina y 3 de Brasil de los planteles finalistas jugaban en sus torneos locales, el dato de que 24 jugadores con experiencia en una Copa del Mundo de la FIFA jugarán esta temporada en el Brasileirao empieza a explicar la diferencia de jerarquías económicas y, por lo tanto, futbolísticas de ambas ligas.
El caso más resonante del último tiempo es el de Diego Costa, ex jugador del Chelsea y del Atlético de Madrid que reforzará el Atlético Mineiro semifinalista de la Copa Libertadores. Antes, futbolistas de la talla de Juanfran, Dani Alves, De Arrascaeta y Filipe Luis, entre otros, ya habían llegado a los distintos equipos del Brasileirao.
De acuerdo a las estadísticas provistas por el sitio Transfermarkt, los equipos que componen el Brasileirao 2021 tienen un valor total de 1.200 millones de dólares. En contrapartida, el Torneo de la Liga de Fútbol Profesional en Argentina, “vale” casi 300 millones menos alcanzando los 915 millones de dólares.
El formato de disputa, no cabe duda, también es analizable. Mientras el Brasileirao se posiciona como uno de los torneos referentes del continente, con 20 equipos todos contra todos en dos vueltas y peleado hasta el final, Argentina muta entre Ligas y Copas, con 26 equipos que pronto serán 28 para, según prometieron los dirigentes, empezar a bajar la cantidad de manera progresiva.
Otro aspecto interesante está en los ingresos de los clubes. Tan sólo en concepto de derechos de televisación, en 2019 la TV brasilera repartió 253 millones de dólares al cambio de ese año para los 20 clubes del Brasileirao según Globo Esporte. Los 26 clubes argentinos, en tanto, recibieron 91 millones de la moneda norteamericana en un torneo que cambia año a año de formato y no genera un gran atractivo hasta las instancias finales.
A contramano de la decisión por ahora predominante en el fútbol argentino y entre la mayoría de los dirigentes, que es mantener a los clubes como asociaciones civiles, mirando a las sociedades anónimas de reojo, el presidente brasileño Jair Bolsonaro sancionó recientemente una ley que permitirá las SAD en Brasil.
A partir de esto se permitirá la creación de clubes – empresas y los equipos estarán autorizados a recibir inversiones de otro estilo al que en la actualidad están acostumbrados al mismo tiempo que también podrán comenzar a emitir acciones, bonos o valores.
Si un club que decida transformarse en una Sociedad Anónima no obtiene ganancias, solo tendrá que pagar el 20% de su deuda en un año. En caso de sí obtener ganancias, este sí estará obligado a usar la mitad de ese dinero para reducir su deuda.
Con esta medida, el estado brasileño buscará que las instituciones reduzcan la toma de deuda descontrolada que, siendo justos en la recorrida de este podcast, es un grave problema que aqueja al fútbol brasilero donde no todo lo que brilla es oro. En principio esta Ley solo autorizará a los equipos masculinos y femeninos de fútbol y no a otros deportes. También se buscará fomentar las inversiones privadas y una mayor transparencia en el manejo de los clubes.
Cruzeiro sería uno de los primeros equipos en transformar su modelo de club en un “Club – empresa”. Incluso durante este año ya realizó cambios en su estatuto para poder llevarlo a cabo. Hoy en la segunda división de Brasil, tiene una deuda de 900 millones de reales. Cruzeiro tiene disponible para vender hasta el 49% de sus acciones a una empresa, por lo tanto el club continuaría siendo parte de los socios, que podrían decidir por el futuro del club.
Por último, más allá de torneo de Primera División las Copas Nacionales de Brasil y Argentina son dos certámenes opuestos. Sin fechas definidas, con sedes que recorren el país a partir de una de las pocas inyecciones genuinas de dinero que es el interés de las distintas provincias, el campeón acreditará un cheque de 6 millones de pesos, un total de 33 mil dólares.
La Copa de Brasil presentó a Intelbras como nuevo main sponsor para las ediciones 2021 y 2022, con 8 millones de dólares (45 millones de reales) para el campeón, un 33% del premio para el campeón de la Libertadores.
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