La salida de Leo Messi y un mal momento futbolístico del Barcelona solo fueron un agregado a una lista de errores que derivaron en uno de los peores balances económicos de la historia del club. Con una devaluación del 11% de la marca “Barca” tras la salida del crack argentino y la no renovación del sponsor principal Rakuten de la camiseta, ahora será Spotify quien ocupe un lugar en el pecho de la camiseta del primer equipo masculino y femenino, la ropa de entrenamiento, asi como también quien le ponga nombre al estadio.



Según el medio RAC1, el vínculo con Spotify, la plataforma líder de música en streaming, será por 280 millones de euros por las siguientes 3 temporadas. También pasaría a formar parte del nombre del estadio, que dejaría de llamarse Camp Nou y se uniría a la lista de equipos como el Bayern Munich, Atlético Madrid y Manchester City que cuentan con denominaciones de estadios de patrocinadores.

Hoy la estrategia de marketing de “naming rights” es una gran inyección económica para muchos de los clubes. En el caso de Allianz y sus 7 estadios a lo largo del mundo (Alemania, Australia, Brasil, Estados Unidos, Francia, Italia y Austria) el pago anual es de 30 millones de euros para cada uno de los clubes que son propietarios de estos recintos.