LaLiga española continúa su proceso de recuperación económica luego de lo que significó la pandemia de coronavirus y, cerrado el mercado de pases, los números demuestran la estabilización: entre los clubes de Primera División gastaron 505,6 millones de euros.


Del monto total gastado, Barcelona y Real Madrid acaparan una buena parte: 233 millones (el 46%). El club Culé incorporó a Jules Koundé, Raphinha y Robert Lewandowski en 153 millones, más Frank Kessié, Andreas Christensen, Héctor Bellerín y Marcos Alonso (libres). El único refuerzo desembolso del Merengue fue por Aurelien Tchouameni (80 millones), ya que Antonio Rudiger fichó con el pase en su poder.

Los más de 500 millones invertidos representan una suba de solo el 27% con respecto al mercado de verano (calendario europeo) del 2020, pero un aumento del 73% si se lo compara con el de 2021, lo que muestra una clara recuperación económica por parte de la mayoría de los clubes, más allá de ser menos de la tercera parte de los 1.319 millones gastados en 2019.

En cuanto a las ganancias, los clubes de LaLiga embolsaron un total de 453 millones, por lo que el balance final del mercado de pases del fútbol español presenta un déficit de 52,6 millones. Los que mejor vendieron fueron Real Madrid, por 92 con las partidas de Casemiro, Borja Mayoral y Takefusa Kubo, entre otros; y Sevilla, que solo con Koundé y Diego Carlos registró un ingreso de 91,5 millones.