Muchos deben pensar que Lionel Messi, Cristiano Ronaldo o Neymar son los futbolistas más ricos del mundo, pero para sorpresa de varios no es así. La distinción pertenece Faiq Bolkiah, jugador que actualmente está sin equipo pero que gracias a su familia cuenta con una fortuna de 20.000 millones de dólares, según Forbes.
Este desconocido futbolista, tras 4 temporadas acaba de romper su vínculo con Leicester. Con 22 años, estaba jugando en el equipo Sub 23 y aún no había debutado en la Premier League. Antes tuvo sus oportunidades con Southampton y Chelsea, pero en ninguno llegó a jugar en la máxima categoría.
Uno se pregunta por qué es entonces el futbolista más rico del mundo sin ni siquiera haber jugado un minuto como profesional. Es que Bolkiah viene de una familia muy poderosa. Hassanal Bolkiah, Sultán de Brunei, es su tío que cuenta con una fortuna de 20.000 millones de dólares. Posee el control absoluto del Ministerio de Finanzas y de los órganos de la administración de la Nación, y tiene una colección de autos muy llamativa: Rolls-Royces, Mercedes-Benz, Ferraris, Bentleys, BMW, Lamborghinis, Aston Martin, entre otros. Por tradición familiar, el futbolista es uno de los posibles herederos a todos estos lujos.
Pese a ser oriundo de Estados Unidos, Bolkiah ya representó a la Selección de Brunei. Desde su debut en el 2016, jugó 6 partidos y metió un gol.
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