El sueño de la mayoría de los futbolistas es llegar a representar a su país y vestir la camiseta de su Selección. Lo más común es que se dé una vez que hayan demostrado sus aptitudes en sus equipos, sin embargo, hay un selecto grupo de jugadores que debutaron como profesionales en su Selección.
Harry Wilson, actual volante de Liverpool, se convirtió en el jugador más joven en debutar con la Selección de Gales con 16 años y 207 días. Fue el 15 de octubre de 2013, en un partido de clasificación para el Mundial de Brasil 2014 ante Bélgica.
Jordan Morris forma parte del plantel de Seattle Sounders de la MLS pero previo a convertirse en jugador del primer equipo, tuvo su aparición con la Selección de Estados Unidos. El 18 de noviembre de 2014 se convirtió en el primer futbolista de su país en jugar para el equipo nacional mientras aún era amateur y formaba parte de un equipo universitario (Stanford). Su debut a nivel clubes se dio recién en 2016 con Seattle Sounders.
En Argentina, hay 3 casos que pasaron por la misma situación. El primero de ellos fue el de Marcelo Trobbiani, quién siendo jugador de la Quinta División de Boca Juniors, entró a un partido de Eliminatorias frente a Bolivia en 1973. Meses más tarde, llegaría su turno en la Primera de Boca.
El segundo ejemplo es seguramente el más conocido, el de Javier Mascherano. No es coincidencia que sea el jugador con más presencias en el seleccionado (143), siendo uno de los pocos que debutó primero en el equipo argentino antes que en su club. El 16 de julio de 2003, el entrenador Marcelo Bielsa lo puso en un amistoso ante Uruguay. Su debut en River llegaría unos meses después frente a Nueva Chicago.
Por último, aparece Emanuel Mammana cuyo estreno en la Selección Argentina fue de la mano de Alejandro Sabella y en un amistoso de preparación para el Mundial de Brasil frente a Eslovenia. Con River entró de manera oficial por primera vez en octubre de 2014 ante Rosario Central por Copa Argentina
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