La Juventus atraviesa un momento convulso tanto dentro como fuera del campo de juego. Una de las principales preocupaciones del club en los últimos años ha sido el aspecto económico.
Según Calcio e Finanza, la Juve terminó la primera parte de la temporada 2022/23 en números rojos. Según el balance anual estipulado, serán 29,5 millones de euros que sumarán un valor aproximado de 81 millones de euros. El valor del cálculo puede variar, ya que el club italiano aún no ha compartido públicamente los valores de la temporada pasada. Pese a ello, se cree que las cifras no cambiarán significativamente.

Con un déficit acumulado de seis años, el nuevo presidente Gianluca Ferrero tendrá un gran desafío en la gestión de las deudas. El último año que el equipo italiano obtuvo beneficios fue 2017, con 42,6 millones de euros. Además de años de mala gestión financiera, a finales de mayo la Juve fue condenada por la Federación Italiana a perder diez puntos en la Serie A debido a irregularidades en el pago de salarios a los jugadores del club. El equipo italiano optó por pagar una multa de 718.000 euros para evitar más pérdidas deportivas.


Desde la temporada 2017/18, son más de 709 millones de euros de pérdidas. La adquisición de Cristiano Ronaldo se produjo tras varios escándalos financieros de la junta anterior; de hecho, representó un intento desesperado de corregir errores anteriores que hicieron que el club acumulara pérdidas de millones de euros. Como consecuencia de una irresponsabilidad fiscal, a finales de julio, la Primera Sala del Comité de Control Financiero de Clubes (Cfcb) de la UEFA sancionó a la Juventus, dejándola sin competir en la próxima edición de la Conference League.

Además, el organismo rector del fútbol europeo ha añadido una posible multa de 10 millones de euros al club italiano si los estados financieros del club para 2023, 2024 y 2025 no cumplen con los requisitos de transparencia establecidos en el Anexo G del Reglamento de Licencias de Clubes.