Fue un mercado de pases único. Porque en general, el más fuerte se da en julio-agosto, cuando los equipos arman sus planteles para comenzar la temporada. Sin embargo, el último de invierno (denominado así por la estación en Europa) fue histórico: por primera vez se gastaron más de 1.500 millones de dólares.


El monto fue revelado por un informe de la FIFA. Ahí, se destaca que en total hubo 4.387 traspasos a lo largo del mundo, en los que se invirtieron 1.570 millones de dólares (1.463 millones de euros), lo que da un promedio de 357.875 dólares por cada futbolista (49,4% más que el de invierno en 2022).

Por supuesto, lo más fuerte estuvo en Europa que acaparó el 90% del gasto. La Premier League se ubicó en el primer lugar con un desembolso de 898.6 millones de dólares (57%), con Chelsea como el principal gastador. Luego, lo siguió la Ligue 1 con 131.9 millones y la Bundesliga con 85.8 millones.


En el cuarto puesto, como sorpresa para mucho, se ubicó el Brasileirao, siendo la primera liga no europea con 70.1 millones. En la sexta colocación quedó LaLiga con 44.2 millones. Además, indica que el 86% de los traspasos tuvieron un pago, lo que significa que 622 se realizaron sin costos.

También se destaca que en el fútbol femenino el número de traspasos continúa avanzando y aumentó un 30%. Se completaron 341 fichajes, en los que se gastaron 774.300 dólares (721.484 euros). “Subraya aún más el impresionante crecimiento exponencial del fútbol femenino en los últimos años”, resaltó la FIFA.