La EURO 2020, que se jugará del 11 de junio al 11 de julio, se celebrará en 12 ciudades distintas, debido a la decisión de la UEFA y su Comité Ejecutivo, con el fin de celebrar el 60° aniversario de esta competencia.

Entre todas las sedes seleccionadas, sólo una podrá contar con toda su capacidad completa. En el marco de la pandemia, Hungría es uno de los países que mejor posicionado está. Por lo tanto, las autoridades le dieron luz verde para que pueda recibir a los fanáticos en el estadio.

Puskás Aréna de Budapest será el privilegiado de llenar completamente sus gradas, con capacidad para 61.000 espectadores. Allí se jugarán los partidos del Grupo F: Hungría-Portugal (15 de junio), Hungría-Francia (19 de junio) y Portugal-Francia (23 de junio), y los Cuartos de Final el 27 de junio. Fue inaugurado en noviembre de 2019 en un amistoso entre Hungría y Uruguay y el año pasado ganó uno de los Prix Versailles de arquitectura en la categoría de instalaciones deportivas.

Dentro de los requisitos para poder entrar al recinto, se dividen los residentes y los extranjeros. Los húngaros podrán acceder si muestran el certificado nacional de vacunación o de haber pasado la enfermedad, mientras que los extranjeros, vacunados o no, deben mostrar una reciente prueba PCR negativa de COVID-19. Además, será obligatorio el uso de barbijos dentro del estadio, habrá 900 expendedores de desinfectante, el pago en los bares se podrán realizar con tarjetas sin contacto y la limpieza será continua.

A diferencia del Puskás Aréna, las otras sedes tendrán otros límites: 50% en Baku, 30% en Sevilla, Copenhague o Glasgow y 25% en Londres o Roma. Esto se debe a que Hungría es el segundo país de la Unión Europea (UE) que más rápido está vacunando. Más del 53% de la población recibió al menos una dosis de las vacunas contra el virus, y el 37% la pauta completa.

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