El anuncio de la vuelta de Arjen Robben al fútbol sorprendió a todos. El delantero holandés, de 36 años, había colgado los botines la temporada pasada jugando para el Bayern Múnich, pero se encontraba bien físicamente como para continuar jugando.

Y así lo demostró al informar que volverá a jugar para el equipo donde debutó como jugador profesional, el FC Groningen de Holanda. Justamente, en su presentación, dijo que volvió “por amor al club”.

Robben había tenido una oferta para volver al club como entrenador de las inferiores o formando parte de la dirección, pero él tenía bien en claro que si volvía lo hacía para jugar. “Si puedo hacer algo por el club, creo que el área donde puedo ser de mayor valor es en el césped”, dijo en la rueda de prensa. El zurdo firmó un contrato por un año.

Tal fue la felicidad que causó el anuncio de la contratación en los hinchas del equipo que en menos de 24 horas se vendieron más de 1.600 abonos para la próxima temporada.

Robben debutó como profesional en el Groningen en el 2000. Tras dos temporadas emigró al PSV Eindhoven del cual saltaría al Chelsea, para jugar durante 3 temporadas y luego pasar al Real Madrid. Tras 2 temporadas en el equipo madrileño pasó al Bayern Múnich, equipo que ha sido su lugar en el mundo y en el cual se había retirado en 2019.

A lo largo de su carrera ganó 30 títulos, entre ellos, 1 liga de España, 8 Bundesligas y una UEFA Champions League.

“La diferencia de nivel con el Bayern Múnich es grande, pero lo hago por el equipo y espero poder divertirme. Me siento muy en forma, estaba incluso entrenando para el maratón de Rotterdam”, dijo Robben.