Luego de haber protagonizado la “pelea del siglo” que a ambos les significó una suma considerable de dinero, la firma responsable de gestionar eventos para la UFC junto con los respectivos representantes del luchador Conor McGregor y el ex boxeador Floyd Mayweather habrían acordado una nueva pelea para el 2018 o 2019, esta vez en un octágono de artes marciales mixtas.

Con el firme objetivo de superar las cifras generadas durante el último combate, la organización empezaría a vender la pelea mediante una agresiva estrategia de marketing una vez que todo el escándalo protagonizado por McGregor se disipe un poco más y se calmen las aguas.

Si bien, tanto la fecha como el lugar son detalles que aún restan por confirmar, medios afines a la disciplina sostienen que la pelea es un hecho y que varios de los patrocinadores que acompañaron la moción el año pasado se subirán sin problemas a una nueva disputa.

A desarrollarse dentro de un octágono de MMA, Mayweather habría pedido como condiciones algunas reglas para poder pelear, tal y como ya hizo el propio McGregor cuando le tocó subirse al ring en su debut como boxeador profesional. Entre otros detalles, el estadounidense solicitó un combate de cinco asaltos (cinco minutos cada uno) en la división de 155 libras y con guantes de cuatro onzas, además de prohibir acciones propias de la disciplina tales como patadas, codazos, rodillazos y derribos.

Fuertemente criticado por “limitar” la pelea, Mayweather aseguró que nada tiene que ver con el espectáculo ni con el desarrollo de la pelea, sino que responde a temas lógicos de paridad al momento del enfrentamiento. Por el momento restan definir varios detalles.

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