Asistir a un estadio de fútbol es un gran evento para los fanáticos de este deporte, pero si a eso se le suma que en la cancha se podrá ver a un jugador como Cristiano Ronaldo, la experiencia puede ser mucho más satisfactoria.

Ahora, la decepción por comprar las entradas y luego no poder verlo puede ser muy grande. Esto es lo que les ocurrió a dos hinchas surcoreanos que compraron cada uno su entrada para ver al delantero portugués durante un amistoso de la Juventus en Seúl y luego se quedaron con las ganas después de que el futbolista no jugara.

¿Qué fue lo que sucedió con Ronaldo? El jugador estrella llegó entre algodones a este encuentro entre el equipo italiano y el equipo All-Star de la K-League. Por eso, pese a la gran concurrencia de fanáticos para el partido, el entrenador Maurizio Sarri decidió no utilizarlo y preservarlo.

Ante esto, dos hinchas decidieron realizar una denuncia por publicidad engañosa, ya que el promotor del partido había anunciado el encuentro y la presencia de Cristiano Ronaldo con “bombos y platillos”. Ese último detalle hizo que las entradas, que tenían un valor de entre 23 y 300 euros.

En cuanto a los hinchas que realizaron la denuncia, el tribunal terminó dándoles la razón y obligó al promotor a pagarle 282 euros a cada uno. Además, el promotor fue acusado de haber estafado por un valor de 6000 millones de won (4,4 millones de euros) en la venta de entradas al asegurar que en el contrato firmado con el equipo italiano figuraba una cláusula que confirmaba que CR7 jugaría al menos 45 minutos del partido.

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