Asistir a un partido para ver jugar a Cristiano Ronaldo era uno de los planes preferidos de los fanáticos del fútbol, previo a la pandemia. Contar con la presencia del goleador portugués podía hacer que un estadio se llenara sólo por él.

Justamente, ese era el plan de miles de fanáticos del actual jugador de la Juventus, que asistieron a un partido luego de ver y escuchar en los anuncios publicitarios que el delantero sería uno de los jugadores del encuentro.

El hecho sucedió en 2019 y la empresa organizadora del partido amistoso entre un combinado de la liga de Corea del Sur y la Juventus había promocionado el evento afirmando que Cristiano, recientemente comprado por el equipo italiano, jugaría al menos 45 minutos del encuentro.

A partir de contar con la presencia de CR7, la empresa organizadora logró vender las 65.000 localidades del estadio para el partido, que se disputó el 26 de julio de 2019. Lo cierto es que finalmente Cristiano, que estaba en el banco de suplentes, no ingresó ni siquiera un minuto del encuentro y la gente se quedó con las ganas de verlo.

Fue a partir de esto que 162 personas del público decidieron presentar acciones contra la empresa organizadora del evento por “publicidad engañosa”. En las últimas horas el Tribunal del Distrito Central de Seúl consideró que la empresa organizadora del partido deberá compensar económicamente a quienes acudieron al partido.

“The Fasta” tendrá que devolver la mitad del importe de las entradas valoradas entre 30.000 y 400.000 wones (27-358 dólares) a los demandantes, más una compensación de 50.000 wones (45 dólares) a cada uno.

Esta es la segunda sentencia de este tipo relacionada con este partido, ya que en febrero pasado un tribunal de la ciudad de Incheon ordenó a la empresa que le pague a 2 personas que asistieron al partido 371.000 wones (332 dólares) a cada uno.

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