La imagen de Cristiano Ronaldo es tan grande y fuerte a nivel mundial que sus fanáticos son capaces de cualquier cosa. El escándalo que se desató luego de que no le convalidaran el gol en el partido entre la Selección de Portugal y Serbia por las Eliminatorias rumbo a Qatar 2022, conllevó una campaña con fines benéficos.

Fue de público conocimiento que, en forma de protesta, el delantero de Juventus arrojó su cinta de capitán cuando el gol fue anulado erróneamente. El brazalete fue recolectado por un agente de seguridad que estaba en el estadio y tuvo la grandiosa idea de ponerla en subasta. La misma tuvo fines solidarios: ayudar a pagar el tratamiento médico de un niño serbio de 6 meses que padece atrofia muscular espinal y necesita asistencia médica en el extranjero. Su familia debe recaudar más de 2 millones de dólares para encarar la recuperación.

La empresa Mozzart Bet embolsó 75 mil dólares para el tratamiento médico de Gavrilo Djurdjevic. “Decidimos participar en la subasta, principalmente por su causa humanitaria, junto con el deseo de despertar la importancia de la responsabilidad social en otras personas, empresas y organizaciones. Desde hace muchos años, Mozzart Bet ayuda a muchas organizaciones encargadas de recaudar fondos para el tratamiento de los niños”, comunicaron.

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