Adquirida en el 1991, la mansión Highland Park, al norte de Chicago, lo tiene a maltraer a Micheal Jordan: la puso a la venta en el 2012, hace más de 10 años, y al no encontrarle compradores, ya redujo su precio ¡a la mitad!, pasó de comercializarla en 29 millones a los 14,8 millones de hoy en día.


La casa cuenta 2.8 hectáreas de terreno, 11 dormitorios, 19 baños, una cancha de básquet, un salón de fiestas, una pista de golf, un bar, un casino, un gimnasio de primer nivel, dos teatros, una sala de cine, un lago para pescar, un garaje para 15 autos, una piscina infinita circular, y una sala de puros, entre muchos otros lujos más.


“Cuando tienes una propiedad tan específica y tan customizada, la venta se convierte en una batalla cuesta arriba”, explicó Adam Rosenfeld, de la startup de bienes raíces de lujo Mercer Vine.

El precio original de la lujosa residencia era de 42 millones de dólares, pero Su Majestad la puso a la venta por primera vez a principios de marzo de 2012 por 29 millones, luego bajó a 21 millones de dólares a principios del 2013, a 16 millones a fines del mismo año, hasta llegar a los 14.8 millones en los que está publicada hoy en día la mansión.

Es más, en 2015, el agente que trabajaba para vender la casa en ese momento prometió que el comprador también recibiría todas las Air Jordan en su talle, pero esta estrategia no funcionó. Frustrado, MJ contrató a la empresa de subastas Concierge Auctions para que concretaran la venta, pero tampoco tuvo éxito, y desde aquel momento la denominaron la “mansión embrujada” del mejor basquetbolista de todos los tiempos.