La Fórmula 1 y los organizadores del Gran Premio de Mónaco han alcanzado un acuerdo que extiende la presencia de la histórica carrera en el calendario hasta la temporada 2035. De esta manera, se prolonga cuatro años más el vínculo que inicialmente finalizaba en 2031. Aunque no trascendieron cifras, el pacto asegura la vigencia de la que muchos consideran la joya de la corona del Mundial.
El GP de Mónaco no solo es tradición deportiva: también es un motor económico para el Principado. Según datos del Instituto Monegasco de Estadística y Estudios Económicos (Imsee), la celebración del evento genera un retorno cercano a los 90 millones de euros en tan solo un fin de semana, consolidándose como una de las principales fuentes de impacto en turismo y consumo.
Desde 1950, la carrera de Montecarlo forma parte casi ininterrumpida del calendario de F1, aunque sus orígenes se remontan a 1929. Sus estrechas calles y curvas icónicas, como la del Casino o la chicane del puerto, la han convertido en uno de los escenarios más emblemáticos del automovilismo. Además, desde 2015, el circuito también recibe a la Fórmula E, que ha disputado allí siete ediciones.
El acuerdo mantiene a Mónaco en una posición de privilegio dentro del campeonato. La prueba ha gozado históricamente de condiciones diferenciadas, como explotar directamente sus derechos comerciales, aunque en 2023 Liberty Media asumió la producción televisiva para unificar la puesta en escena. La renovación refuerza la idea de que Montecarlo seguirá siendo un escenario imprescindible para la F1, tanto por su historia como por su impacto global
