Leila Pereira, presidenta del Palmeiras, continúa consolidándose como una de las figuras más influyentes del fútbol brasileño gracias a su firmeza para defender los intereses de su club y su activa participación en la gestión del deporte. En esta ocasión, la dirigente tomó una decisión que beneficiará no solo a su institución, sino también al resto de los equipos del Brasileirao que tienen jugadores convocados para los amistosos de la selección de Brasil en Europa.

Para facilitar el regreso de los futbolistas y que puedan estar presentes en la recta final del campeonato local, Pereira puso a disposición su avión privado. Inicialmente pensó en Vitor Roque del Cruzeiro, quien podrá volver inmediatamente después del partido contra Túnez el martes 18, pero luego extendió el ofrecimiento al resto de los clubes: "Si algún equipo está dispuesto a que sus jugadores regresen en mi avión conmigo y Vitor Roque, solo tienen que preguntar. Si hay espacio, no tendré ningún problema", declaró la mandamás del Verdao.


La respuesta fue inmediata. Fabricio Bruno del Cruzeiro y Paulo Henrique del Vasco da Gama confirmaron su lugar en el vuelo para llegar a tiempo a los partidos del miércoles 19 ante Juventude y Gremio respectivamente. Flamengo -rival directo del Palmeiras en la lucha por el Brasileirao y Libertadores- y Bahía también habrían solicitado espacio para sus convocados, demostrando que el gesto de Pereira trasciende las rivalidades deportivas.

La presidenta del Palmeiras dejó clara su filosofía: "La rivalidad debe quedarse en el terreno de juego. Los clubes deberían unirse cada vez más por el crecimiento del fútbol brasileño". Mientras tanto, Brasil enfrentará a Senegal este sábado en Londres y a Túnez el martes en Lille, Francia, en partidos donde Carlo Ancelotti continuará evaluando jugadores de cara al Mundial 2026.