Pablo Cavallero es, actualmente, el entrenador de arqueros de Estudiantes de La Plata, acompañando el cuerpo técnico que encabeza Mauricio Pellegrino. En la última serie del Pincha por la Copa TOTAL Sudamericana, su trabajo cobró notoriedad tras conocerse la información que le brindó a Hilario Navarro, arquero del equipo, en la definición por penales que lo tuvo como figura.

Cavallero comenzó como arquero profesional en Vélez Sarsfield en 1995. Luego pasó a Unión de Santa Fe para recalar en España donde hizo la mayor parte de su carrera. Allí jugó en Espanyol, Celta de Vigo y Levante entre 1999 y 2006. En 2008/09 se retiró atajando para Peñarol de Uruguay. Con la Selección argentina jugó las Copas del Mundo de Francia 1998 y Corea-Japón 2002, además de los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996.

A sus 40 años, charló con Milenium Sports 106.7 para explicar un poco más del trabajo de un entrenador de arqueros, con lo acontecido en Uruguay como disparador.

Pablo, ¿cómo es integrar el cuerpo técnico de Estudiantes?
A Mauricio hace 25 que nos conocemos. Con el Profe Macaya arrancamos en Vélez en 1992 y con el resto también nos conocemos hace mucho. El hecho de que hayamos podido estar en el exterior, hace que uno haya aprendido cosas y encaminar un estilo de trabajo.

Uno cuando es jugador piensa que sabe mucho, más si te llega a tocar ir a la Selección. Pero a mí Mauricio me sorprendió mucho por su trabajo en Italia e Inglaterra, maneja otro tipo de información y jamás dejas de aprender a su lado. Los chicos tienen una información muy desmenuzada del rival.

¿Qué importancia tiene el rol de un entrenador de arqueros?
El entrenador de arqueros cobra cada día más importancia dentro de un cuerpo técnico. Hoy se trabaja mucho por líneas y está todo muy parejo. Todo saltó más a la luz por este tema de los penales pero constantemente hoy por hoy, gracias a internet y a los programas que rodean al mundo del fútbol, estamos con este trabajo.

¿Qué tan importante es para un arquero tener este trabajo de fondo?
El arquero necesita mucho de la parte psicológica. Está mucho tiempo sólo y convive constantemente con el fracaso, por los aciertos y los desaciertos. Buscamos trabajar situaciones de partido. Por ejemplo, la semana que viene jugamos contra River y ya empezamos a imaginar situaciones con centros imaginando que entra Teo Gutiérrez. Llevamos todo al entrenamiento para que el día que llegue el partido, nuestros arqueros piensen en que esta situación ya la vivieron.

Yo, en lo personal, tuve que trabajar con un psicólogo deportivo porque me distraía mucho cuando los partidos estaban definidos, a favor o en contra. Pensaba en lo que tenía que hacer el día siguiente y hasta me ponía a cantar canciones.

¿Cómo es tu trabajo diario?
Mauricio trajo un sistema muy bueno de Inglaterra, de su época con Rafa Benítez. Al margen de eso, tratamos de buscar información y detalles para darle al jugador la mayor cantidad de opciones posibles. Un pequeño detalle te hace ganar un partido. Para que tengan una idea, tuvimos una semana de trabajo antes de los penales ante Peñarol, mirando videos y analizando las todo lo que pudimos. Después, por suerte Hilario tuvo una gran noche y tuvimos la suerte de pasar de fase.

¿Cómo fue la historia del famoso papel que tuvo Hilario?
Yo tenía un papel mucho más extenso, con ocho pateadores. Habíamos buscado penales hasta hace cuatro años atrás. Teníamos varios de cada jugador y llegamos a una conclusión de la variable más frecuente. Durante el partido fui mirando quién quedaba en el campo de juego para sacar los posibles pateadores, y armé un papel más chico, rápido, como para que Hilario lo tuviese encima. Después me di vuelta el buzo de entrenador, con los colores de Estudiantes, para pasar desapercibido y me fui caminando tranquilo para ponerme atrás del arco y estar cerca de él. El mérito es todo de Hilario, hizo muy bien su trabajo. Estuvo muy tranquilo todo el tiempo, uno sólo aporta su experiencia.

Por último, a Verón lo conoces desde hace mucho tiempo. ¿Cómo lo ves en su nueva etapa de dirigente?
Lo veo muy bien. Lo conozco desde principios de los 90, son muchos años desde las selecciones juveniles. Creo que le va a dar un cambio importantísimo al club. Está todo el día acá, recorriendo y hablando con los socios. Me pone muy contento por él, por Estudiantes y porque seguramente en un futuro le va a aportar mucho al fútbol argentino en general.