
La acusación del conjunto culé es que “no puede competir en igualdad de condiciones con los otros 38 clubes de LaLiga, que en agosto de 2021 firmaron el acuerdo con CVC”. Justamente, Barcelona fue uno de los tres equipos que no están incluidos en el vínculo (Real Madrid y Athletic Club fueron los otros).


Por lo tanto, Barcelona no puede competir en las mismas condiciones por el fair play financiero, ya que “no puede ampliar el límite salarial de su plantilla en ese porcentaje y desconoce respecto a qué presupuesto o partida de ingresos podría hacerlo, si se diera el caso”. En septiembre, el límite salarial del Blaugrana era de 656.5 millones de euros.