A la espera de la finalización de la fase de grupos, los equipos argentinos que disputan la Copa Sudamericana saben que la consagración les abrirá muchas puertas, además de darles el título internacional. La más conocida es la Recopa, que la jugarían ante el campeón de la Copa Libertadores, pero además, por tercera vez consecutiva, el campeón tendrá acceso a un nuevo trofeo.

Se trata del Desafío de Clubes UEFA-CONMEBOL, certamen único que se inauguró en 2023 y que enfrenta al campeón de la Europa League con el ganador de la Sudamericana. Su primera edición fue el año pasado y se consagró campeón el Sevilla, que venció a Independiente del Valle en los penales tras el 1-1 en los 90 minutos.


El novedoso Desafío de Clubes, que este año tendrá como protagonistas a Atalanta y Liga de Quito, surgió con el objetivo de fortalecer la relación entre las confederaciones de ambos continentes.

Entonces, en caso de consagrarse en la Sudamericana, el campeón no solo se garantizará jugar la Recopa y la próxima Copa Libertadores, sino también enfrentarse a un rival europeo con la posibilidad de sumar una nueva estrella.