El domingo se celebró una nueva edición del evento más importante del fútbol americano en Estados Unidos y la jornada, en ratings, solo fue superada por los juegos del 2014 y 2017. En un duelo histórico, los Kansas City Chiefs se quedaron con el triunfo ante los Philadelphia Eagles.

Aproximadamente 107.000.000 de estadounidenses vieron la transmisión de televisión de Fox y otros 6.000.000 la siguieron mediante diversas plataformas digitales alcanzando un récord histórico desde que se conoce esta nueva alternativa de comunicación. La audiencia total fue de 113.000.000 de personas y superó a los 112.000.000 del Super Bowl del año pasado. Además, fue la tercera vez que más fanáticos consumieron el evento en la historia y la mayor cantidad en los últimos 6 años.


Por delante del show de este año solo se ubican el Super Bowl de 2015 (114.000.000 de espectadores con el partido de New England Patriots y Seattle Seahawks) y el Super Bowl de 2017 (113.700.000 con New England Patriots y Atlanta Falcons). Sin embargo, el espectáculo que brindó Rihanna en el mediotiempo promedió los 118.700.000 de personas en Fox, superando ampliamente a los consumidores del último evento en donde estuvieron Dr. Dre y Eminem.

Según la señal oficial que estuvo a cargo de difundir el partido, el total de espectadores que se detuvieron al menos un momento en la transmisión fue de 183.000.000.