Luego de haber revolucionado el mercado internacional de pases en el fútbol, la Superliga china finalmente empezó a presentar inconsistencias y preocupación en sus dirigentes, luego de que esta semana se intimidara a 13 de los 16 clubes de la primera categoría por parte de la Confederación Asiática de Fútbol (AFC) en concepto de deudas por no pagar salarios, premios, transferencias ni impuestos.
Y es que, tal y como dice el último comunicado oficial de la Confederación continental los únicos equipos que están al día en sus obligaciones son Yanbian Fude, Henan Jianye y Guizhou Hengfeng, mientras que el resto tendrá hasta el 15 de agosto para pagar o presentar un plan de pagos viable si no quieren sufrir duras sanciones.
De este modo, clubes como el Shanghai SIPG, Hebei Fortune, Shanghai Shenhua, Guangzhou Evergrande y Beijing Guoan (todos con futbolistas sudamericanos en sus filas) deberán ordenar sus cuentas y pensar en nuevas estrategias para estabilizar sus finanzas, dentro de las cuales no se descarta la posibilidad de recortar personal y por ende rescindir con varios de sus jugadores estrella.