Apenas terminó el partido contra Australia, Lionel Scaloni pudo respirar aliviado. No solo porque se consiguió el pasaje a los cuartos de final, sino que también, salvo con los que están con molestias físicas y dependerán de su evolución día a día, podrá contar con todo el plantel para el cruce con Países Bajos el próximo viernes a las 16 horas, ya que ninguno alcanzó las dos amarillas. Aunque, hay un par que deberá cuidarse en Argentina.


En el Mundial de Qatar, si un futbolista alcanza las dos amonestaciones, deberá cumplir una fecha de suspensión. Por eso, la alarma estaba encendida en el cruce con los Socceroos por la posibilidad de que se sumen cartulinas amarillas. Sin embargo, en el equipo argentino no hubo ninguna.

De esta forma, al encuentro con la Naranja Mecánica habrá solamente dos con el llamado de atención: Gonzalo Montiel (la recibió vs Méxcio) y Marcos Acuña (se la ganó vs Polonia). En caso de que alguno de los dos recibiera una el viernes, se perderían el hipotético enfrentamiento por la semifinal en caso de que Argentina avance.


Pero la buena noticia no termina ahí, porque a partir de semifinales, las tarjetas acumuladas se borran. Es decir, si uno es amonestado el viernes (que no sean los dos ya mencionados), quedaría en cero nuevamente. La FIFA aplica este método desde hace un tiempo para que los equipos no pierdan jugadores en la recta final. Por supuesto, siempre y cuando no haya una roja.