
Al día de hoy, el club mejoró tanto deportivamente, siendo uno de los líderes de la Premier League en los últimos años, y económicamente luego de que el club fuera puesto en venta por el mismo dueño en una cifra de 3.000 millones de euros.
La invasión de Rusia a Ucrania y la relación de Abramovich junto a Vladimir Putin, presidente del país en cuestión, pusieron en peligro la permanencia del empresario en suelo británico, quién además se encuentra cerca de recibir severas sanciones, por lo que decidió dejar el mando de la gestión del equipo para entregárselo a la organización benéfica “Blues”, no sin antes también dejar una deuda de 1.500 millones de euros que será resuelta con parte de la venta del club.


Entre los posibles compradores que se rumorean podemos encontrar al empresario suizo Hansjörg Wyss, un multimillonario con un patrimonio neto de 5.1 mil millones de euros. Sin embargo afirmó que el precio es un tanto alto y sería un riesgo involucrarse por sí solo, aunque aceptaría formar parte de un consorcio.
"Puedo imaginarme bien comenzando en el Chelsea con socios", afirmó. "Primero tengo que examinar las condiciones generales. Si compro el Chelsea, debe ser con un consorcio formado por 6 o 7 inversores".
La otra opción que resuena es Sir Jim Ratcliffe, jefe de INEOS, una empresa química multinacional, que también vió en un pasado la posibilidad de hacerse con el club, pero nunca llegó a buen puerto por “diferencia de valores y posturas” con la actual dirigencia.