El delantero japonés Naohiro Takahara, recordado por su breve paso por Boca en el segundo semestre de 2001 durante la presidencia de Mauricio Macri, se retiró del fútbol a los 44 años. El nipón disputó su último partido oficial el domingo pasado con el Okinawa Sport-Verein, el club que fundó, preside y del que es entrenador.
Con el triunfo por 2-1 en el alargue ante Vonds Ichihara, el elenco de Takahara, que usa una camiseta azul y amarilla en homenaje a Boca, se salvó del descenso y se mantendrá al menos una temporada más en la cuarta división del fútbol japonés. Con el objetivo cumplido, el punta, quien era el capitán y utilizaba la diez, colgará los botines tal como había anticipado en septiembre.
Takahara llegó al Xeneize a mediados de 2001 procedente del Júbilo Iwata como una medida de marketing del ex presidente de Boca para desembarcar en suelo asiático, donde meses antes el Xeneize había derrotado al Real Madrid en la Intercontinental y mientras se preparaba para una nueva final ante Bayern Munich a fin de ese año. Finalmente Carlos Bianchi no lo llevaría para ese compromiso.
En su paso por la Ribera, Takahara disputó seis encuentros, cinco como titular, y convirtió un gol ante Lanús, en una victoria por 6-1 en La Bombonera por la séptima fecha del torneo Apertura. Sin embargo, al cabo de seis meses regresó a su país y luego desempeñó la carrera mayormente en su país aunque entre 2006 y 2008 también jugó en la Bundesliga con Hamburgo y Eintrach Frankfurt.
Pese a su edad, durante todo 2023, Takahara se mantuvo muy activo en su rol de dirigente-jugador-entrenador. De los 31 partidos que jugó su equipo, solo se ausentó en tres y fue titular en 21 oportunidades. Además aportó dos goles y una asistencia a lo largo de la temporada.
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