
Este jueves, no hubo ni tiempo para prepararse unos mates en la mañana argentina. Apenas pasaron 79 segundos del comienzo del encuentro, el capitán argentino recibió de Enzo Fernández para colocar la pelota junto a un palo y abrir el marcador en Beijing. Y ese grito, quedará marcado por dos motivos.

Sin embargo, no es la única marca que alcanzó. Con el grito frente a Australia estiró a siete partidos consecutivos marcando por lo menos un gol con la casaca de la Albiceleste. Su récord era de seis cotejos que se cortaron ante Polonia en la Copa del Mundo. Después, justamente, volvió a comenzar la racha contra los Socceros, siguió con Países Bajos, Croacia, Francia, los amistosos con Panamá, Curazao y nuevamente Australia. Messi, y dos nuevos récords para su carrera.
