Los flashes estaban todos en el Mundial de Qatar 2022 cuando Vélez Sarsfield, aprovechando el vacío en el calendario, se puso manos a la obra y modernizó la infraestructura del club. Y esto quedó a la luz el 30 de enero, cuando al Fortín le tocó recibir a Gimnasia y Esgrima La Plata por la primera fecha de la Liga Profesional. La inversión total fue superior a los 4 millones de dólares.

Lo que más se evidenció fue el cambio en el campo de juego, dónde se montó un césped 95% de hierba natural y un 5% restante de fibra, tal como se utilizó en los ocho estadios del Mundial de Qatar y se acostumbra en las canchas de los mejores equipos de Europa. La prevención de lesiones, más comodidad para los futbolistas, menor desgaste y un mejor drenaje hacen que esta fórmula sea cada vez más popular en el mundo.

Al césped híbrido, además, se le agregó un sistema de calefacción, que irradiará calor por debajo del terreno, para que el pasto crezca durante toda la temporada, y no se vea afectado durante el invierno.

A su vez, se modernizaron los vestuarios del equipo local, visitante, árbitros, alcanzapelotas y antidoping. “Son posiblemente los vestuarios más lindos y más modernos del fútbol argentino. Se le dio el mismo confort a los vestuarios visitantes y eso tiene que ver con lo que es Vélez como institución: siempre dar el ejemplo y recibir a los de afuera de la mejor manera”, aseguró Gastón Chalabe, arquitecto del club y miembro de la Comisión Directiva, a Infobae.

Pero eso no es todo, porque también se cambiaron las butacas de todos las laterales del estadio, asientos que no se cambiaban desde el Mundial de Argentina 1978, por unos con un modelo personalizado y diseño ligado a la estética del club. A esto, se le sumó la quita del alambrado de la Popular Oeste para mejorar la visibilidad de los espectadores que visiten el renovado Jose Amalfitani.