El coronavirus causó una fuerte crisis económica a nivel mundial. Los distintos rubros laborales se vieron y se verán afectados por la poca productividad y actividad que hubo durante los primeros meses del año. El fútbol no quedó exento a todo esto, siendo una de las industrias que más dinero mueve.

Tomando como ejemplo Italia, según había revelado Gabriele Gravina, presidente de la Federación de Fútbol Italiana (FIGC), la Serie A había perdido en la primera parte de la cuarentena aproximadamente 595.33 millones de dólares. No hay equipo que no haya sentido el impacto de la pandemia, y entre los más afectados figuran: Parma, Genoa, Sampdoria, Sassuolo, Hellas Verona y Torino. Los 6 están atravesando momento difíciles, tanto deportivos como económicos obligando la búsqueda de nuevos inversores para poder afrontar la crisis, al igual que ocurrió con la Roma.

Una breve radiografía de la situación de cada uno:

Parma: el que corre en ventaja es el inversor qatarí Hisham Al Hamad Al Mana, que tiene pensado adquirir una participación del 51% por 75 millones de dólares y la adquisición del 100% de las acciones de la empresa en un plazo de 5 años. Este grupo pertenece a una de las familias más ricas de Qatar, siendo el distribuidor exclusivo de Nissan, Infiniti y Renault en el país.

Genoa: en julio obtuvo un préstamo de 8.5 millones de dólares de 2 bancos para pagar salarios y cubrir pérdidas. Sin embargo, su dueño Enrico Preziosi, rechazó una propuesta de 35 millones de dólares de un grupo de inversores que incluía a Andrea Radrizzani, presidente del Leeds United. Otro interesado es el inversor marroquí Rahhal Boulgoute.

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Sampdoria: el propietario Massimo Ferrero estuvo en negociaciones con un grupo de inversores liderado por el exjugador, Gianluca Vialli y apoyo financieramente por el administrador de fondos de cobertura estadounidense Jamie Dinan y el fundador de Pamplona Capital Management, Alex Knaster. Sin embargo, la oferta fracasó porque no pudo ofertar los 120 millones solicitados.

Sassuolo: la muerte de su expropietario, Giorgio Squinzi, aceleró la búsqueda de un nuevo dueño porque todo indica que sus herederos no están del todo convencidos en seguir con el legado.

Hellas Verona: su actual presidente, Maurizio Setti, dejó en claro que en cuanto aparezca una oferta aceptable comenzará con las negociaciones de venta.

Torino: pese a que en julio el grupo de inversores “Console and Partners” presentó una propuesta al presidente, Urbano Cairo no tiene intención de escuchar ninguna oferta, salvo que el monto garantice lo necesario para salir de la situación apremiante.

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