La UFC empieza a solucionar sus conflictos judiciales con los luchadores por sus salarios. La promotora y los deportistas alcanzaron un acuerdo por el que la competición de artes marciales mixtas se compromete a pagar 335 millones de dólares para resolver una demanda colectiva interpuesta de sus luchadores.
En ella se alegaba que suprimió artificialmente los salarios de los luchadores y que les debía alrededor de 1.000 millones de dólares, según Reuters.
En un comunicado TKO, el nuevo hólding formado por la UFC y la WWE, ha confirmado este acuerdo y ha señalado que el pago se realizará a plazos durante un período de tiempo acordado que no ha trascendido. Asimismo, la promotora niega haber fijado los salarios de los luchadores.
Las demandas aducían a un abuso de poder por parte de la UFC para impedir que los deportistas compitieran en promotoras rivales mediante contratos exclusivos. Al respecto, los luchadores defienden que se eliminó su compensación por combate.