Jueves 6 de Marzo de 2025
Indian Wells, el primer Masters 1000 de la temporada, anunció que abandonaría la superficie llamada Plexicushion por otra denominada Laykold, que también se utiliza en Miami, US Open, Cincinnati y Canadá. Obviamente, esto sorprendió al mundo del tenis, tanto a los fanáticos como a los propios jugadores. Carlos Alcaraz, por ejemplo, opinó al respecto y declaró: "Es algo que no entendí, hace 25 años que se jugaba en las mismas condiciones. Todavía no entrené ahí, solo sé que son un poco más rápidas".
Philippe Dore, el director de marketing de la competencia estadounidense, explicó brevemente las condiciones que otorga Laykold: "El compromiso de Laykold por la precisión y consistencia de las canchas se alinea perfectamente con la misión del torneo de ofrecer una excepcional superficie de juego para los tensitas". Además, habló de la velocidad: "La pista se caracteriza por su precisión y consistencia en el ritmo al ajustar la velocidad a un margen de 0,5 puntos".

Por un lado, el cambio beneficia a los protagonistas, ya que podrán jugar en la misma superficie que en el resto de los torneos importantes que se disputan en cemento. Sin embargo, esta lógica de hacer el tenis monótono y siempre en las mismas condiciones parece estar imponiéndose, por lo que las competencias podrían perder el atractivo de la adaptabilidad que requieren al jugar una u otra.
Siguiendo con esta línea de pensamiento, hay quienes creen que la gira sudamericana de principio de año debería abandonar el polvo de ladrillo para jugarse en cemento, de forma que sirva como preparación para los dos Masters 1000 de la temporada. Al parecer, el tenis comienza a apuntar para esos lados, y las decisiones como este cambio lo demuestran.
Philippe Dore, el director de marketing de la competencia estadounidense, explicó brevemente las condiciones que otorga Laykold: "El compromiso de Laykold por la precisión y consistencia de las canchas se alinea perfectamente con la misión del torneo de ofrecer una excepcional superficie de juego para los tensitas". Además, habló de la velocidad: "La pista se caracteriza por su precisión y consistencia en el ritmo al ajustar la velocidad a un margen de 0,5 puntos".

Por un lado, el cambio beneficia a los protagonistas, ya que podrán jugar en la misma superficie que en el resto de los torneos importantes que se disputan en cemento. Sin embargo, esta lógica de hacer el tenis monótono y siempre en las mismas condiciones parece estar imponiéndose, por lo que las competencias podrían perder el atractivo de la adaptabilidad que requieren al jugar una u otra.
Siguiendo con esta línea de pensamiento, hay quienes creen que la gira sudamericana de principio de año debería abandonar el polvo de ladrillo para jugarse en cemento, de forma que sirva como preparación para los dos Masters 1000 de la temporada. Al parecer, el tenis comienza a apuntar para esos lados, y las decisiones como este cambio lo demuestran.
