La Superliga China se encuentra en conflicto con Nike. La marca de indumentaria de Estados Unidos cuenta con el monopolio de los equipos de este torneo, tal como sucede por ejemplo con adidas y la Major League Soccer de Estados Unidos.

Lo cierto es que en los últimos días comenzó a desarrollarse una fuerte disputa entre la firma japonesa y una gran parte de la sociedad china, a partir de la negativa a utilizar en sus productos algodón de la región de Xinjiang.

Esta decisión fue tomada por Nike y otras importantes marcas de ropa como H&M y New Balance a partir de un informe presentado por el centro de estudios australiano Aspi Institute, que denunció que para cosecharlo se emplea mano de obra forzada de centenares de uigures y otras minorías. Desde Pekín niegan que esto ocurra e indican que en realidad la cosecha de algodón está automatizada en toda la región.

Nike, al ser el sponsor técnico de todos los equipos de la Superliga china, ha puesto en serias dudas su continuidad como patrocinador de los equipos y de la Selección.

La relación de Nike con el fútbol chino comenzó en 2009 cuando firmó un contrato de patrocinio con la Federación China de Fútbol por 10 años a cambio de una cifra cercana a los 180 millones de euros.
En 2011, todas las camisetas de los 16 equipos de la Superliga china comenzaron a ser confeccionadas por Nike y 4 años después, tras desembolsar 130 millones de euros, se convirtió en el sponsor técnico de la Selección. En 2018, Nike y la Superliga china ampliaron su vínculo por una década más, hasta 2029.

La viralización de la postura tomada por Nike sobre su negativa a adquirir el algodón de Xinjiang no cayó bien en algunos clubes de la Superliga china, que no tardaron en mostrar su malestar. A partir de esto, una gran cantidad de equipos ya se posicionaron y en las fotos oficiales que distribuyen en sus cuentas oficiales, han eliminado los logotipos de la firma estadounidense.

Incluso marcas locales como Kelme se han manifestado a partir de esto publicando un comunicado público, a tal punto de dejar en claro que se encuentran aptas para producir los uniformes de todos los equipos e incluso de la selección nacional.