La Serie A aceptó la oferta a la baja de sus actuales socios audiovisuales en Italia a cambio de garantizarse más años de contrato. La gestora del fútbol profesional italiano ha anunciado que el calcio seguirá viéndose en Dazn y Sky a cambio de 900 millones de euros anuales entre 2023-2024 y 2028-2029, frente a los 927,5 millones del ciclo actual.
Al respecto, la competición asegura que la cifra podría llegar a los 1.000 millones de euros en un plazo de cinco años. Dazn emitirá los diez partidos –siete en exclusiva–, a cambio de 700 millones, y Sky se queda con tres partidos en coexclusividad por 200 millones de euros. En función de las altas que se produzcan en la OTT británica, los clubes recibirán un pago variable que permitiría superar las cifras del ciclo actual.
La oferta salió adelante en la asamblea general de la liga de este lunes con 17 votos a favor y la única oposición de la Salernitana y el Cagliari; el Nápoles no participó en la votación tras ausentarse de la sala en ese momento.
Esta era la principal oferta que tenía sobre la mesa la Serie A, cuyos dirigentes eran favorables a la renovación, aunque sea ligeramente a la baja –en el fijo–, frente a la posibilidad de crear un canal propio de la Serie A para la emisión de la competición. Ese escenario, era aún más incierto y abocaba al torneo a una venta directa al consumidor en un momento en el que ninguna otra competición premium ha optado por esa vía en su mercado doméstico.
Uno de los presidentes críticos con el acuerdo es Aurelio De Laurentiis, dueño del Nápoles, que ha asegurado que “es una derrota para el fútbol italiano, con esta oferta el fútbol morirá”, según declaraciones recogidas por la agencia de noticias Ansa. El dirigente ha ampliado que la relación de la Serie A “debe ser directa con el aficionado, no directa con Sky y Dazn”.
Por su parte, Urbano Cairo, propietario del Torino, ha respondido a su homólogo del Nápoles asegurando que “no creo que este acuerdo lleve a la muerte del fútbol italiano”. “Al contrario, podría ser más importante que el actual gracias al reparto de ingresos. Por eso hay que luchar contra la piratería”, ha afirmado en referencia, en esto último, al dinero extra que recibirán los clubes si alcanzan ciertas cotas de audiencia y abonados.
“Lo del canal era una sugerencia, pero también representaba un riesgo: la actividad futbolística por sí sola tiene riesgos”, apostilló el empresario, experto en medios audiovisuales como dueño de RCS Group, accionista mayoritaria de Unidad Editorial en España.