Los deportes electrónicos fueron uno de los pocos rubros que salieron “favorecidos” de la pandemia de coronavirus, en relación a la cantidad de nuevo consumidores que sumaron a lo largo del año. Sin embargo, tomando en cuenta la parte económica, el confinamiento obligatorio alteró los ingresos. De acuerdo a datos publicados por Newzoo, caerán a 950.3 millones de dólares en 2020, cuando estaban previsto a llegar a generar generar 1.100 millones este año. De la proyección de ingresos totales, se espera que 584.1 millones provengan del patrocinio, 163.3 millones de los derechos de los medios, 108.9 millones de las tarifas de los editores, 21.5 millones de la tecnología digital, 19.9 millones de la transmisión por secuencias y 52.5 millones de mercancías y boletos. Pensando y analizando a futuro, en 2023 se supone que la cifra de ingresos pasará a 1.600 millones de dólares.

Una de las patas que más alteró los números fueron los ingresos por mercancías porque los consumidores no pueden comprar en los locales, muchos de estos cerrados por la pandemia. Se estimaba conseguir unos 76.2 millones de dólares, ante los actuales 52.5

Más allá de la economía, los eSports esperan cerrar 2020 con una audiencia de hasta 92 millones de personas, lo que equivale a un incremento del 7% respecto a los 86 millones de euros de 2019. Los números son prometedores, pero en comparación a 2019 hubo una leve baja ya que en ese ejercicio el desarrollo de la audiencia se situó en el 8.8%.

Del total de la audiencia, 33 millones de personas, el 35%, corresponde a personas que ven eSports más de una vez al mes, mientas que aquellos que los consume menos de una vez al mes, ascienden a 59 millones de personas.