El fútbol siempre nos regala historias para contar y la de Brentford no es la excepción. El equipo pasó a ser noticia porque logró el ansiado ascenso a la Premier League después de 74 años de ausencia. Luego del intento fallido de la temporada pasada ante Fulham, logró en esta oportunidad vencer Swansea a partido único en Wembley.

Pero fuera de la hazaña deportiva, el club solía ser reconocido por contar siempre con una buena base de jugadores juveniles. Sin embargo, de a poco fueron cambiando esa modalidad porque empezaron a sufrir varias pérdidas de sus futbolistas a equipos más poderosos. Ahora, se centran en encontrar talentos jóvenes, basándose en estadísticas, planillas y números.

Su filosofía se basa en partir de los modelos matemáticos para definir su estrategia en el mercado de transferencias. Estudian qué es lo que le falta al equipo para luego encontrar al mejor refuerzo para suplantarlo. Para los amantes del cine, seguramente lo relacionaron rápidamente con la película Moneyball protagonizada por Brad Pitt. En ese caso el deporte es el béisbol pero la estrategia es la misma: utilizar las estadísticas para fichar a los jugadores más adecuados al sistema.

Dentro de los futbolistas que pasaron por la institución, se destacó un francés con raíces argentinas. Neal Maupay arribó con 16 años como uno de los proyectos a pulir. Precisamente, esa es la estrategia del club, buscar futbolistas que tienen potencial y analizar el contexto de cada uno. Le bastó un par de años para convertirse en el mejor jugador de la categoría y que Brighton pagara 19,8 millones de libras para transformarlo en la mejor venta de toda la historia del club.

No hay certezas si este es mejor método que el que suelen usar varios clubes, de viajar y observar futbolistas en un sin fin de canchas. Lo cierto es que, por el momento, al Brentford le viene funcionando. Gracias a ello y al trabajo de todos, regresó a la máxima categoría del fútbol inglés.

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