El disgusto de gran parte del mundo del fútbol con la llegada de dueños multimillonarios al mando de los clubes más importantes del fútbol europeo se trata, en gran parte, de una consecuencia relacionada a las diferencias en cuanto a los valores de los equipos. Instituciones con una gran historia que rápidamente se puede ver dejada a un segundo plano cuando los millones de euros aparecen en cifras y todo un camino construido puede desaparecer en cuestión de meses, perdiendo una de los estandartes más importantes: La identidad.

La pandemia con el Covid-19 afectó enormemente a los clubes europeos, acostumbrados a una economía andante, donde rápidamente tuvieron que analizar diferentes opciones para lograr estár por encima de la línea de los balances económicos, aún si requiere poner en juego muchos aspectos del club. En estos últimos 2 años se hizo muy común la llegada de propietarios multimillonarios al fútbol mundial: Los casos más resonantes pueden ser el Newcastle y ahora el Chelsea, pero una gran cantidad de equipos quedaron en manos de grupos de mucho dinero y ¿poco fútbol?



El caso del Grupo City es distinto: Un proyecto que muestra su éxito con tan solo ver los resultados de los equipos que posee: Un Manchester City dominante en Inglaterra, un Montevideo City Torque que finalmente logró enfrentar y jugar de igual a igual con los mejores clubes de Uruguay, logrando su participación a la Copa Libertadores, y un New York City FC que es el actual campeón de la MLS, por nombrar los más destacados.

Sin embargo a veces los millones y los proyectos no llegan a ser más que aquellos equipos con historia y una identidad conservadora, y ese justamente lo que ocurre con el NAC Breda de los Países Bajos y sus socios: El equipo que se encuentra en un pésimo momento en la 2° división había tenido una oferta por 7 millones de euros para ser adquirido por el grupo empresario, pero sus fanáticos rápidamente mostraron su descontento en las redes y en los partidos, a tal punto de que la oferta que estaba a punto de ser cerrada, terminó siendo dada de baja por los propietarios candidatos luego de ver el desconento del público.



"El proceso estaba tan avanzado que la propiedad del NAC Breda ya había anunciado de manera oficial el cambio de manos que se producía en el club. Sin embargo, fue en ese momento cuando los ultras de la entidad holandesa tomaron la iniciativa para jugar su papel. Sus comportamientos violentos, sus pancartas en el estadio y sus continuas protestas terminaron consiguiendo su cometido." afirma el diario El Español.

Lo concreto es que sus actuales propietarios no paran de recibir ofertas, aunque la más destacada era esta, con el adicional de que el holding provenía de Abu Dhabi, donde el grupo árabe colabora mediante el Manchester City para que varios jugadores pasen a préstamo al NAC Breda. El club está en venta, pero luego de la oposición de los hinchas, el futuro dueño tendrá que tener bien en claro las cosas antes de ofertar.