Martes 2 de Septiembre de 2014
La identidad visual representa, de manera simbólica, la construcción de la imagen de un evento deportivo que, en este caso, es el más importante del planeta: la Copa del Mundo de la FIFA. Y esta identidad intentará enumerar una lista de rasgos distintivos para lograr ser la expresión más concreta y visual de la representación grafica del país anfitrión. A través de esta, se buscará transmitir sensaciones que harán vivir al espectador el color de la fiesta del fútbol. Muchos son los elementos que construyen visualmente este tipo de acontecimientos que, con el paso de los años, evoluciona favorablemente y nos sorprende una y otra vez.
En la última década, importantes agencias de diseño, como las inglesas Works y Radiant, aportaron un sello distintivo y mediante la gráfica ayudaron a crear verdaderas marcas sobre las principales competiciones europeas. Si bien tuvo una antesala por demás interesante en Sudáfrica 2010, el equipo de gestión de marcas de la FIFA desarrolló una identidad corporativa que logró reflejar durante el último Mundial de fútbol, la máxima muestra de expresión a nivel visual a partir de varios elementos.
Si bien el emblema, la mascota y la pelota ya son clásicos protagonistas, hay otras representaciones que van desde la decoración de las gradas de los estadios y las fan fest, hasta el marcador de juego en la señal de TV, pasando por el diseño de los codiciados tickets, las credenciales de prensa, las aplicaciones de los smartphones y los buses oficiales que transportan a los seleccionados. Todo este gran combo, conforma un sistema gráfico que identifica y le da una identidad a la competición.
Millones de personas en todo el mundo centraron sus miradas en Brasil, en un país que representa a través del color a la fiesta y la alegría y que, también, es sinónimo de naturaleza. Los invito a analizar como se logró transmitir todas estas sensaciones a través de la imagen.
El emblema oficial de Brasil 2014.
El Comité Organizador local de Brasil y la FIFA recibieron más de 125 propuestas del diseño del emblema, que fue encargado a las 25 agencias brasileras de diseño y publicidad más prestigiosas. Un jurado compuesto por notables personalidades del ambiente del deporte, la cultura y el diseño, entre los que se destacó el recordado arquitecto Oscar Niemeyer, quien proyectó la ciudad de Brasilia en la década del ´50, fue el encargado de elegir el emblema ganador, denominado Inspiração (Inspiración), que fue desarrollado por la agencia África.
El mismo representó a tres manos con los colores de la bandera de Brasil las cuales, entrelazadas, conformaban al trofeo de la Copa del Mundial de la FIFA. Según aseguraron, Inspiração es símbolo de victoria, fuerza y unión, además de interpretar la labor humanitaria, la modernidad y la diversidad del país anfitrión.
El emblema, elemento distintivo de la identidad visual del evento, fue presentado en sociedad en Johannesburgo, en julio 2010, en el cierre del Mundial de Sudáfrica.
La Mascota
Fuleco fue la mascota que representó a la Copa del Mundo de Brasil. Históricamente, las mascotas están orientadas al público infantil y transmiten de una manera lúdica y dinámica los valores de la competición. La figura de la mascota, reproducida por millones a través del merchandising, logra una cercanía de grado único.
A lo largo de los mundiales, las mascotas se destacaron, simbolizando al país organizador a través de sus costumbres o vestimentas. La primera fue Willie, el león de Inglaterra 1966, que fue sucedido, en 1970, por Juanito, un niño mexicano. El dúo Tip y Tap fueron las mascotas de Alemania ´74, mientras que la última representación humana sucedió en Argentina 1978: el Gauchito, con pelota y rebenque. Naranjito en España ´82 logró tal popularidad que tuvo una serie propia de dibujos animados. Pique fue el pimiento con bigotes de México 1986, en tanto en Italia ´90 se produjo un quiebre, ya que Ciao fue una mascota geométrica conformada por barras y una pelota por cabeza.
En Estados Unidos ´94, un perro volvió a darle vida a los animales, que tomaron protagonismo hasta la actualidad, a excepción de Corea-Japón 2002, que tuvo a Ato, Kas y Nik (3 criaturas futuristas). Footix, un gallo, representó a Francia 1998; Goleo VI, un león, a Alemania 2006 y Zakumi, un leopardo, a Sudáfrica 2010.
La mascota elegida de 2014 fue un armadillo (pariente cercano de nuestra mulita), un animal en serio peligro de extinción que fue bautizada a través de una votación en la web, de la cual participaron más de 1,7 millones de personas.
El nombre Fuleco resultó de la fusión de dos palabras: futebol (fútbol) y ecología y fue el preferido del 48% de los votantes. Los nombres descartados fueron Zuzeco (mix entre azul y ecología), con un 31% y Amijubi (mezcla de amistad y jubileo), con el 21%
Fuleco, que al girar su caparazón tenía la capacidad de transformarse en pelota para protegerse de sus depredadores, representó, según sus creadores, a la belleza natural de Brasil y a su compromiso con la protección del medio ambiente. Los tonos azules, simbolizaron el cielo y las aguas claras del país anfitrión junto a sus mares, llenos de vida. Los colores amarillos y azules contrastaban con el verde del campo de juego. Enfatizar la importancia del medio ambiente y de la ecología fue un objetivo importante a comunicar en el Mundial de Brasil.
La pelota.
Todo gira en torno a ella, es la gran estrella invitada a la fiesta del fútbol. Mundial tras Mundial varía de peso y materiales, pero nunca de foto. Desde 1970, la dueña de la pelota es adidas, sponsor de FIFA. La empresa alemana diseñó los últimos 12 modelos: Telstar (1970 y 1974), Tango (1978 y 1982), Jalisco (1986), Etrusco (1990), Questra (1994), Tricolore (1998), Fevernova (2002), +teamgelst (2006) y Jabulani (2010). La pelota oficial de Brasil 2014, recibió el nombre de Brazuca y fue conformada por seis paneles idénticos en forma de hélice. Lo concreto es que se llevó todas las miradas del planeta.
Antes de ser presentada, fue probada durante dos años y medio por 600 jugadores de 30 equipos en todo el mundo, entre los que se destacaron Messi, Dani Alvez, Xabi, Schweinstelger y Gerrard. El nombre de la pelota fue elegido a por medio de una votación en septiembre de 2012, imponiéndose a otras opciones como Carnavalesca o Bossa-Nova".
En la última década, importantes agencias de diseño, como las inglesas Works y Radiant, aportaron un sello distintivo y mediante la gráfica ayudaron a crear verdaderas marcas sobre las principales competiciones europeas. Si bien tuvo una antesala por demás interesante en Sudáfrica 2010, el equipo de gestión de marcas de la FIFA desarrolló una identidad corporativa que logró reflejar durante el último Mundial de fútbol, la máxima muestra de expresión a nivel visual a partir de varios elementos.
Si bien el emblema, la mascota y la pelota ya son clásicos protagonistas, hay otras representaciones que van desde la decoración de las gradas de los estadios y las fan fest, hasta el marcador de juego en la señal de TV, pasando por el diseño de los codiciados tickets, las credenciales de prensa, las aplicaciones de los smartphones y los buses oficiales que transportan a los seleccionados. Todo este gran combo, conforma un sistema gráfico que identifica y le da una identidad a la competición.
Millones de personas en todo el mundo centraron sus miradas en Brasil, en un país que representa a través del color a la fiesta y la alegría y que, también, es sinónimo de naturaleza. Los invito a analizar como se logró transmitir todas estas sensaciones a través de la imagen.
El emblema oficial de Brasil 2014.
El Comité Organizador local de Brasil y la FIFA recibieron más de 125 propuestas del diseño del emblema, que fue encargado a las 25 agencias brasileras de diseño y publicidad más prestigiosas. Un jurado compuesto por notables personalidades del ambiente del deporte, la cultura y el diseño, entre los que se destacó el recordado arquitecto Oscar Niemeyer, quien proyectó la ciudad de Brasilia en la década del ´50, fue el encargado de elegir el emblema ganador, denominado Inspiração (Inspiración), que fue desarrollado por la agencia África.
El mismo representó a tres manos con los colores de la bandera de Brasil las cuales, entrelazadas, conformaban al trofeo de la Copa del Mundial de la FIFA. Según aseguraron, Inspiração es símbolo de victoria, fuerza y unión, además de interpretar la labor humanitaria, la modernidad y la diversidad del país anfitrión.
El emblema, elemento distintivo de la identidad visual del evento, fue presentado en sociedad en Johannesburgo, en julio 2010, en el cierre del Mundial de Sudáfrica.
La Mascota
Fuleco fue la mascota que representó a la Copa del Mundo de Brasil. Históricamente, las mascotas están orientadas al público infantil y transmiten de una manera lúdica y dinámica los valores de la competición. La figura de la mascota, reproducida por millones a través del merchandising, logra una cercanía de grado único.
A lo largo de los mundiales, las mascotas se destacaron, simbolizando al país organizador a través de sus costumbres o vestimentas. La primera fue Willie, el león de Inglaterra 1966, que fue sucedido, en 1970, por Juanito, un niño mexicano. El dúo Tip y Tap fueron las mascotas de Alemania ´74, mientras que la última representación humana sucedió en Argentina 1978: el Gauchito, con pelota y rebenque. Naranjito en España ´82 logró tal popularidad que tuvo una serie propia de dibujos animados. Pique fue el pimiento con bigotes de México 1986, en tanto en Italia ´90 se produjo un quiebre, ya que Ciao fue una mascota geométrica conformada por barras y una pelota por cabeza.
En Estados Unidos ´94, un perro volvió a darle vida a los animales, que tomaron protagonismo hasta la actualidad, a excepción de Corea-Japón 2002, que tuvo a Ato, Kas y Nik (3 criaturas futuristas). Footix, un gallo, representó a Francia 1998; Goleo VI, un león, a Alemania 2006 y Zakumi, un leopardo, a Sudáfrica 2010.
La mascota elegida de 2014 fue un armadillo (pariente cercano de nuestra mulita), un animal en serio peligro de extinción que fue bautizada a través de una votación en la web, de la cual participaron más de 1,7 millones de personas.
El nombre Fuleco resultó de la fusión de dos palabras: futebol (fútbol) y ecología y fue el preferido del 48% de los votantes. Los nombres descartados fueron Zuzeco (mix entre azul y ecología), con un 31% y Amijubi (mezcla de amistad y jubileo), con el 21%
Fuleco, que al girar su caparazón tenía la capacidad de transformarse en pelota para protegerse de sus depredadores, representó, según sus creadores, a la belleza natural de Brasil y a su compromiso con la protección del medio ambiente. Los tonos azules, simbolizaron el cielo y las aguas claras del país anfitrión junto a sus mares, llenos de vida. Los colores amarillos y azules contrastaban con el verde del campo de juego. Enfatizar la importancia del medio ambiente y de la ecología fue un objetivo importante a comunicar en el Mundial de Brasil.
La pelota.
Todo gira en torno a ella, es la gran estrella invitada a la fiesta del fútbol. Mundial tras Mundial varía de peso y materiales, pero nunca de foto. Desde 1970, la dueña de la pelota es adidas, sponsor de FIFA. La empresa alemana diseñó los últimos 12 modelos: Telstar (1970 y 1974), Tango (1978 y 1982), Jalisco (1986), Etrusco (1990), Questra (1994), Tricolore (1998), Fevernova (2002), +teamgelst (2006) y Jabulani (2010). La pelota oficial de Brasil 2014, recibió el nombre de Brazuca y fue conformada por seis paneles idénticos en forma de hélice. Lo concreto es que se llevó todas las miradas del planeta.
Antes de ser presentada, fue probada durante dos años y medio por 600 jugadores de 30 equipos en todo el mundo, entre los que se destacaron Messi, Dani Alvez, Xabi, Schweinstelger y Gerrard. El nombre de la pelota fue elegido a por medio de una votación en septiembre de 2012, imponiéndose a otras opciones como Carnavalesca o Bossa-Nova".
