Río 2016

Peugeot celebra la medalla de plata de Del Potro en Río 2016

Peugeot celebra la medalla de plata de Del Potro en Río 2016
Martes 16 de Agosto de 2016
La bandera argentina en la espalda, los brazos en alto y lágrimas en los ojos. Ésa es la imagen de Juan Martín del Potro que recorrió el mundo una vez que finalizó el último partido de tenis que disputó durante los Juegos Olímpicos 2016, el domingo pasado, frente a Andy Murray. Ovacionado, el tandilense no podía ocultar su felicidad y su orgullo. Se había planteado llegar a lo más alto durante esta competencia, y lo logró. Ayer, recién llegado de Río de Janeiro, la ciudad que lo vio volver a las canchas con toda la garra, Del Potro, con la medalla de plata colgada del cuello, fue ovacionado al aterrizar en Buenos Aires. Horas más tarde declaró: “Tengo tranquilidad por el nivel que demostré, cada partido para mí era una final. Casi no vuelvo a jugar al tenis, agradezco a mi familia y a la gente que nunca dejó que bajara los brazos”.

“Es de las experiencias más importantes que me pasaron en la vida. Me sorprendió mi nivel, como la derecha iba cada vez más fuerte cuando casi no tenía ni fuerza. No sé si alguna vez jugué tan bien al tenis como en ese partido con Djokovic, y el apoyo y la energía de la gente fue fundamental. Ni soñando me imaginaba terminar de esta manera. Fueron partidos inolvidables, una de las experiencias más importantes que viví”, confesó Del Potro. “Los tres medallistas fueron justos ganadores. Jugué contra Nadal como si fuera el partido más importante de mi vida para garantizarme una medalla, no quería volver con las manos vacías”.

Después de un descanso, Del Potro volverá al circuito: en un mes estará en Escocia para competir en las semifinales de la Copa Davis, torneo en el que también participará Andy Murray.

“Apuesto todo a la temporada que viene, a la recuperación de mi mano para poder volver a pelear con los mejores”. Así cerró este importante capítulo en su vida este embajador de Peugeot que además de un excelente nivel de juego demostró que el espíritu de competición sigue intacto.

Galería