Lunes 17 de Junio de 2024
Dennis Schröder, el base de 30 años que juega en los Brooklyn Nets y fue campeón y MVP del Mundial de Básquet con Alemania en 2023. Una vez finalizada la temporada de la NBA, el basquetbolista regresó a su país natal para jugar al fútbol en el equipo de su cuñado.
La franquicia de Nueva York no tuvo un gran año. Finalizaron decimoprimeros en la Conferencia Este con un balance de 32 victorias y 50 derrotas. Quedaron afuera de los Playoffs, lo que provocó que los jugadores empiecen sus vacaciones a mediados de abril. Schröder decidió regresar a casa, cambió temporalmente de deporte y se puso los botines.
Además de ser un gran fanático del fútbol, el novio de su hermana, Daniel Ziolo, juega en el Bleckenstedt, y el alemán tuvo el deseo de compartir cancha con él,. Es por esto que consiguió una autorización para jugar en mayo del 2022, pero fue recién dos años más tarde cuando pudo cumplir su deseo. Primero presenció un encuentro ante el SVG Gottingen y apenas unos días más tarde mantuvo una charla con el entrenador, Gokhan Arikoglu y acordaron jugar el próximo partido.
Con su metro ochenta y cinco, Schröder fue el extremo izquierdo de su equipo. El tándem lo hacía con su cuñado, quien jugó de lateral por ese costado. El resultado no fue el mejor, ya que perdieron 5 a 1, pero no modificó en nada las aspiraciones de un equipo que finalizó sexto la Landesliga Braunschweig. "Mi primer partido de fútbol fue una experiencia realmente genial para mí", expresó el base en su cuenta de Instagram tras finalizar el encuentro.
El club no quiso anunciar a su "contratación sorpresa" en sus redes sociales durante las horas previas al partido, porque sabían que no iban a poder albergar a los medios de comunicación ni a los fanáticos que se acerquen. Así lo explicó su secretario técnico: “Somos una pequeña asociación de pueblo donde la mayor parte del trabajo se realiza a través del trabajo voluntario. El personal que trabaja en el club son todos voluntarios. No habríamos podido hacer frente al revuelo mediático”. Ese revuelo se generó después y le sirvió al equipo para aumentar sus seguidores y popularidad.
La franquicia de Nueva York no tuvo un gran año. Finalizaron decimoprimeros en la Conferencia Este con un balance de 32 victorias y 50 derrotas. Quedaron afuera de los Playoffs, lo que provocó que los jugadores empiecen sus vacaciones a mediados de abril. Schröder decidió regresar a casa, cambió temporalmente de deporte y se puso los botines.
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Además de ser un gran fanático del fútbol, el novio de su hermana, Daniel Ziolo, juega en el Bleckenstedt, y el alemán tuvo el deseo de compartir cancha con él,. Es por esto que consiguió una autorización para jugar en mayo del 2022, pero fue recién dos años más tarde cuando pudo cumplir su deseo. Primero presenció un encuentro ante el SVG Gottingen y apenas unos días más tarde mantuvo una charla con el entrenador, Gokhan Arikoglu y acordaron jugar el próximo partido.
Con su metro ochenta y cinco, Schröder fue el extremo izquierdo de su equipo. El tándem lo hacía con su cuñado, quien jugó de lateral por ese costado. El resultado no fue el mejor, ya que perdieron 5 a 1, pero no modificó en nada las aspiraciones de un equipo que finalizó sexto la Landesliga Braunschweig. "Mi primer partido de fútbol fue una experiencia realmente genial para mí", expresó el base en su cuenta de Instagram tras finalizar el encuentro.
El club no quiso anunciar a su "contratación sorpresa" en sus redes sociales durante las horas previas al partido, porque sabían que no iban a poder albergar a los medios de comunicación ni a los fanáticos que se acerquen. Así lo explicó su secretario técnico: “Somos una pequeña asociación de pueblo donde la mayor parte del trabajo se realiza a través del trabajo voluntario. El personal que trabaja en el club son todos voluntarios. No habríamos podido hacer frente al revuelo mediático”. Ese revuelo se generó después y le sirvió al equipo para aumentar sus seguidores y popularidad.